Solo tu.

Sigo sin entender esa capacidad que tienes de cambiarme de estado de ánimo al momento, me dices un par de palabras, y nadie me puede hacer más feliz; en cambio, me dices otro par, que no suenen tan bien, y no se por qué, cambio completamente, no lo entiendo. Esto solo tú lo puedes hacer, y ni siquiera creo que sepas que tienes dicha capacidad, será algo que nadie llega a saber, igual yo también la tengo con otras personas, pero a mí nunca me lo dicen. Tú tienes la suerte de tener esa magia conmigo, y yo te lo digo tal como lo siento, para que lo sepas, para que sepas que nadie como tú me hace tan feliz, y nadie como tú me puede joder tanto. Que con tu estúpida cara, me regalas una simple sonrisa, y para mí, ese día, es el mejor de mi vida.

Recordando..

Te levantas a las seis y media de la mañana. Te metes en la ducha y el agua sale fría no, helada. Intentas desayunar algo, ya sabes que eso de comer algo a las seis de la mañana es casi imposible. Sales de casa, con la chaqueta abrochada hasta arriba y te diriges a clase, a trabajar, o a ningún sitio. Haces lo que tengas que hacer, algo que, en realidad, no te apasiona en absoluto. Sales de donde tengas que salir y vuelves a tu casa. Reconoces que quizás sea el único momento del día que te cause algo de satisfacción, llegar y notar el calor interno que desprende, el que tú le has hecho tener, o el que quien te este esperando a hecho que tenga.
Es entonces cuando eres tú. Te quitas la máscara que llevas puesta todo el día y haces lo único que te reconforta: vivir de veras, y disfrutar de esos pequeños momentos que te da como si se fuese a romperse el mundo en dos. Y eso se limita a escucharla aunque sea un poco, leer una de esas historias que te cuentan sus ojos, que puede que nunca ocurran, pero aun así, ¿por qué no intentarlo? ¿por qué no intentar escribir algo así? (o soñar con vivirlo), ver una de esas películas que te hacen llorar de principio a final... O mejor que ella te la cuente.
Probablemente esa lista de cosas sea lo único que te hace sonreír 50 veces al día lo menos.Y, al final del día lo único que te preguntas es, si seras suficiente.


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¿Sabes? Algunas personas nacen en el mundo para otras personas que ya estaban aquí. Algo así como almas gemelas, polos opuestos que necesitan estar juntos para sobrevivir o como esas estrellas que no salen sin otra estrella al lado. Algunas personas vienen al mundo por otras, para que a lo largo de los años se encuentren y se den cuenta de que no pueden vivir separadas. Algunas personas son como tú y como yo. Son como los polos opuestos de un imán, se atraen, como las estrellas, aunque esten a millones de kilometros, brillan para que tú las veas..


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¿Qué ocurre cuando una persona te cuenta que ha soñado contigo el mismo día que tú has soñado con ella? Quizás no deba considerarse un sueño, porque ha existido más allá de los límites de nuestra cabeza, ha casi rozado la realidad, desdibujándose un poco antes de que abrieramos los ojos... No sé, a veces no me atrevo a decirle a alguien que he soñado con él o ella, pero quizás se esté callando lo mismo y haya sido el travieso comité de los sueños siameses que en el momento de perder la noción de la razón y a través de un estudio molecular de nuestros deseos ha sintonizado, a la vez, un mismo sueño para dos personas que tímidamente sueñan lo que no se atreven a confesar....