miércoles, 3 de febrero de 2010

Cuéntales cómo te sentiste la primera vez que te miré; cuando de nuestros ojos saltaron chispas a causa del fuego que empezaba a arder en nuestros corazones, cuando mi mirada atravesó tu piel y te desnudó el alma.
Diles qué fue lo primero que pasó por tu mente cuando rocé tu mano, aparentemente sin querer, cuando el estómago se te encogió y el corazón te dio un vuelco.
Confiesa que, hasta el momento de conocerme, nunca te habías visto con el valor suficiente para afrontar tus sentimientos, y que jamás nadie pintó una sonrisa tan grande y tan sincera como la que yo te ayudé a dibujar día tras día en tu rostro cuando me veias acercarme a ti. Si quieres, explícales también que por las noches te acompaño en tus sueños y que, por las mañanas, me echas de menos aun sin dejar de pensarme. Explícaselo, explícamelo y atrévete a decirles y a decirme que NO estás enamorada...


[...]



- escuchame,siempre me sentido solaa,siempre,aunq haya tenido a gente,pero siempre me sentido sola,siempre,hasta que,hasta que empezaste a quererme - y que aunque pasen mil años yo siempre voy a estar esperadote,siempre,porque no hay nadie en este mundo que te quiera tanto como yo,nadie,te quiero,yo voy a estar esperandote todos los dias,dia tras dia,porque se que antes o despues,te enamorarás de mi...y voy a estar esperandote siempre...





..........................................................................................................................................................................





Deseaba escuchar un poco más de ti, deseaba que se me ocurriera la excusa perfecta para pedirte que te quedaras un rato más. Pero las ideas me habían abandonado. Y mi cuerpo tampoco iba a conseguir mucho más, podía intentarlo pero no lo hice. Se me hacía un nudo en la garganta cada vez que te veía marchar, cada vez que te alejabas de mí una vez me habías abrazado. Era inútil pedirte que te quedaras porqué yo misma sabía que no podías hacerlo, o quizá sí. Entonces mientras te cogía fuerte la mano, empecé a pensar en voz alta sin darme cuenta. "Imagínate que te quedas y no tenemos que dar explicaciones a nadie, y no importa el tiempo que haga fuera mientras tenga el calor de tu cuerpo. Y no importa ya lo que dirán mañana sino que ahora estés aquí. No quiero que cojas este autobús, que te alejes ni un sólo centímetro de mí, aunque sea sólo por hoy."
Me di cuenta de que me mirabas alucinada por lo que había dicho. Supongo que me había vuelto loca ya, pero sólo yo sé las ganas que tenía de perderme en ti. Y no soportaba aquella distancia, la que creábamos tú y yo cada vez que la otra se marchaba. Era una prueba de alto nivel para ver si aguantábamos, y cada vez creía que íbamos a menos, pero no nunca era así... De pronto una voz de niña pequeña me salió y te dijo "Quédate conmigo, aunque sea sólo hoy."


Volar sin despegar del suelo...*

Siento que los días pasan y tu imagen no se borra. El corazón reclama volver a sentir por tí. Se escapa el aire de mi boca y vuela donde estás. Te sigo amando y siento que me ahogo en ansiedad. Mi historia solo es eco, el latir que duele el pecho, son esos recuerdos, la foto de aquel beso. Eras tanto para mí que te hice un mundo nuevo, algo paralelo donde el viento jugaba a vernos. Cada abrazo me evadía y me lleno de vida, aún los imagino cuando me roza la brisa. Pienso en tí quizás más de lo que debería, te adueñas de mis versos, de mi mente y de mi vida. Si volviera a nacer volvería para conocerte, nadie a conseguido hacerme sentir tan fuerte. Perdono porque el tiempo hace del odio algo inerte, te quise porque un día fuiste alguien diferente. Te devuelvo cada sueño que me regalaste, todas las promesas, nuestros besos, los instantes, las últimas palabras que se ahogan en dolor. Jamás me arrepentí de querer dejarlo todo por tí. Confieso que esperaba que volvieras a por mí y esperando vi marchitar las rosas de aquel jardín. Mi corazón se para y se quiere despedir confiesa que te sigue amando y sigue preguntandose por que te fuiste. Ahora solo queda el eco y esta canción triste..*

....

A ella le encanta andar descalza por su casa. Explotar las pompitas del papel de embalar. El olor del mar y el de un bote de cola cao recién abierto. Ella tiene mucha facilidad para que se le hagan nudos en el estómago. Dibuja castillos de arena en el aire mientras pisa muy fuerte el suelo. No dice todo lo que piensa pero hace tiempo que dejó de pensar todo lo que dice. Ha aprendido que un te quiero demasiado tarde no sirve de nada. Me explicó que para ella, la amistad es como una planta que hay que regar casi todos los días para que no se marchite. Le gusta descubrir canciones nuevas, la compañía de alguien que le pueda enseñar cualquier cosa nueva, las ciudades nocturnas vistas desde las alturas, y los besos en espiral. Se enamoró hasta casi perder el sentido y el norte. Y así aprendió que las heridas de guerra son muy difíciles de curar (o de olvidar).
Le encanta beber cosas que estén frías por eso del escalofrió que después te recorre hasta los dedos, las tortillas y ver(-te). Hay días que se revela y otros que lo poco que tiene lo da. Es terca y demasiado cabezota, con un carácter muy difícil de llevar y más aún de comprender. Tal vez por eso, desde hace tiempo, dejó de buscar que la comprendieran. Siente miedo. Mucho. Por eso se considera una valiente. Quien dice no sentir miedo, no puede conocer la valentía.

Ella busca miradas entre los ojos de gente. Tiene un baúl lleno de momentos con banda sonora. Y se le pone la piel de gallina al recordar momentos. Ella es coleccionista de instantes que la dejan sin aliento. Es capaz de amar hasta el infinito y marcharse sin que te des cuenta. Ella no pertenece a nadie. Es como el viento, como el mes de Abril que tiene una duración determinada y después... desaparece. Hasta que el tiempo la vuelva a traer a esta orilla



.........

A veces me enciendo y me apago como una vela, me tumbo como una gilipollas a ver las estrellas pensando en qué daría yo por tocarte el pelo, como una aguja del reloj que ha perdido el tiempo...