jueves, 5 de julio de 2012

Punto y aparte

A veces es necesario dejar ir a las personas que obstaculizan tu progreso, por que es posible que no te dejen ver a quien tienes delante. Esas personas que tienes clavadas, que no te hacen caso. Te preocupas por ellas y te preguntas si ellas lo harán por ti. Y entonces, tal vez algún día, te darás cuenta de que no merece la pena luchar por alguien que no lucharía por ti. Es entonces cuando de verdad sabes que ha llegado el momento de dejarlas ir, aunque duela...

jueves, 28 de junio de 2012

Tumblr emedj


“Lo que quiero decir es que no me apetece convertirme en una de esas personas a las que se olvida fácilmente después de haber sido tan importantes, tan especiales, tan influyentes y tan valoradas y que años después no son más que un rostro desdibujado y un recuerdo distante.”
— Where Rainbows End

lunes, 5 de marzo de 2012

Si tú me dices ven lo dejo todo…. pero dime ven

"…debes darte cuenta de que nos hemos pasado la vida desde pequeños respondiendo a la pregunta ‘qué me gusta’…y ese ‘qué me gusta’ marca nuestro mundo. Da la sensación de que si nos gusta algo es un indicador del rumbo o un deseo y debes saber que no…Lo que nos gusta no es nuestro camino, ni tampoco lo que no nos gusta. A veces el rumbo puede estar en lo que nos provoca indiferencia, en aquello que no nos apasiona ni aborrecemos…Entiende esto. Has de confiar en ti, no en lo que crees que te gusta a ti…La senda no la marca lo que te gusta a ti sino que la marcas tú…"

jueves, 19 de enero de 2012

..

Cuando un cristal o un plato se rompe genera sonido de algo rompiendose. Cuando una ventana se hace añicos, la pata de una mesa se rompe, o se cae un cuadro de la pared hace ruido. Pero cuando tu corazón se rompe, el silencio es total. Es algo tan importante que piensas que su ruptura hará tal ruido q se oirá en todo el mundo, o sonará como un gong o un timbre. Pero simplemente hay silencio y entonces es cuando desearías que hubiese algún sonido que distrajese tu dolor.
Si lo hay, es interno. Es un grito y nadie puede oirlo, solo tú. Es tan alto que tus oidos pitan y tu cabeza duele. Es tan salvaje, como una herida abierta expuesta a agua marina pero cuando realmente se rompe, solo se oye el silencio. Gritas en tu interior, pero nadie puede oirlo...